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Las entidades públicas cuentan con dos tipos de contratos que se deben tener en cuenta al trabajar con estas instituciones. ¡Conócelas!, aquí te las explicamos. 

Para muchos, tener la posibilidad de trabajar en el sector público es una oportunidad única por medio de la cual pueden crecer como profesionales al mismo tiempo que brindan un servicio a su comunidad; aunque aceptar laborar para el Estado es una decisión bastante positiva, es importante conocer las diferencias que existen entre contratistas y funcionarios o servidores públicos.

 

¿Qué es un contratista?

   

En nuestro país, los contratistas públicos son personas naturales o jurídicas que son contratadas por una entidad pública, como el gobierno nacional, departamental, municipal, entidades autónomas, etc., para ejecutar obras, servicios o entregar suministros específicos. Sus contratos suelen establecerse con plazos de finalización fijos que dependen en gran medida de la labor que van a realizar para el Estado. Además de ello, hay otras características, como las que te compartiremos a continuación, que son claves para diferenciar la labor que efectúan los contratistas:
 

• Licitación: Para estos cargos, los individuos son seleccionados a través de procesos de licitación, donde se busca obtener el mejor precio y calidad para el trabajo o servicio requerido.
   
• Contrato: Los contratistas públicos trabajan bajo un contrato, que establece los términos y condiciones de su trabajo, incluyendo el plazo, el precio y los requisitos de calidad.
   
• Certificación: Las personas catalogadas como contratistas del Estado deben cumplir con las normas y regulaciones específicas relacionadas con la contratación en Colombia, incluyendo la certificación de cumplimiento para poder participar en procesos de licitación.
   
• Pagos: La entidad pública contratante hace los pagos correspondientes al contratista por los trabajos o servicios realizados, previa verificación de cumplimiento y aprobación.
   
• Supervisión: Independientemente de la organización pública que los contrate, esta tiene el deber de supervisar el trabajo del contratista para asegurar que se está cumpliendo con los términos y condiciones del contrato.
   

¿Qué es un servidor público?

     

Por su parte, un servidor público es una persona que desempeña un cargo o función tanto en entidades del Estado como en descentralizadas. Este puede ser un empleado o funcionario público o también puede ser un miembro de un consejo de administración o junta directiva de una entidad. Los servidores públicos son responsables de administrar los recursos y servicios del Estado y tienen la obligación de actuar con ética, transparencia, objetividad y eficiencia en el desempeño de sus funciones. 
 

Generalmente, la labor de un servidor público es de carrera, es decir, se accede a través de procesos de selección mediante concurso público, con excepción de algunos cargos políticos. Ahora bien, similar al caso de los contratistas, en conjunto con lo anterior, los funcionarios públicos cuentan con las siguientes características:
 

• Rendir cuentas: Los funcionarios públicos tienen el deber de demostrar resultados a la ciudadanía sobre su gestión y decisiones tomadas en el desempeño de sus funciones.
   
• Prohibiciones: Los servidores del Estado tienen prohibiciones legales como aceptar dádivas, difundir propaganda política, realizar actos de corrupción, caer en situaciones de conflicto de intereses, etc.
   
• Permanencia en el cargo: En este aspecto, todo depende de la naturaleza de su labor, ya que existen cargos de carrera o de confianza, cargos políticos y cargos temporales.
   
• Sistemas de evaluación: El desempeño laboral de estos servidores es constantemente evaluado mediante un sistema de evaluación específico.
   

Diferencias entre las dos clasificaciones
 

Teniendo claros los conceptos y características de cada uno, ahora podemos pasar a explicarte qué factores diferencian los roles de los contratistas y los servidores públicos:
 

• Función: Los contratistas son personas o empresas contratadas por una entidad pública para realizar un trabajo específico en un plazo fijo, mientras que los servidores públicos, por otro lado, son personas que desempeñan cargos que implican variedad de funciones diferentes.  
   
• Contratación: Los servidores públicos son seleccionados mediante concurso público y, por otro lado, los contratistas son elegidos a través de procesos de licitación. 
   
• Normatividad: Los contratistas deben cumplir con las normas y reglamentos específicos relacionados con la contratación en Colombia, mientras que los servidores públicos deben cumplir con las normas y reglamento relacionados con el servicio público.
   

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Nota tomada de: Bayport